La aluminosis es una patologÃa del hormigón. Dicha patologÃa se manifiesta en elementos prefabricados, principalmente viguetas, fabricadas con cemento aluminoso. Este cemento se utilizó para la fabricación de viguetas desde mediados del siglo pasado hasta los años 80, ya que ofrecÃa un menor tiempo de fraguado y una aparente mayor resistencia.
Con el tiempo se descubrió que dicho cemento sufrÃa cambios quÃmicos ante determinados agentes, potenciado por las altas temperaturas y la humedad ambiental. Estos cambios quÃmicos aumentan la porosidad del cemento, disminuyendo su resistencia mecánica. La porosidad además facilita la corrosión del componente metálico del hormigón armado, debilitandolo aún más. El proceso puede acelerarse también por fugas accidentales de agua. Una vez que el problema de la aluminosis fué detectado fué prohibido el uso de los cementos causantes de dicha patologÃa. En España se usaron mucho dichos cementos entre los años 50 y 80. Se estima que existen alrededor de 300.000 viviendas construidas con viguetas de dicho material. Las zonas más afectadas son las del litoral mediterraneo, especialmente el área de Barcelona. Su uso fué prohibido en nuestro paÃs en 1977. En otros paises, como Francia, su uso estaba limitado y regulado desde los años 40, y solo se permitÃa su utilización en estructuras de caracter temporal.
Normalmente los efectos de la aluminosis se pueden detectar a tiempo, permitiendo asà su reparación y la salvaguarda de la integridad fÃsica de las personas. Son raros los casos de hundimiento de inmuebles por esta causa, pero algunos han tenido lugar, como por ejemplo el sucedido en Barcelona en el año 1990, que produjo una vÃctima mortal. Normalmente sus consecuencias suelen ser sobre todo económicas